jueves. 28.03.2024

El BISA plantó 925 árboles durante el 2022 y ahora tiene 7.278 en siete áreas estratégicas de La Paz y Sucre en el marco del programa “Pulmones Banco BISA” que, a partir de 2023, se expandirá a otras ciudades de Bolivia.

La iniciativa tiene la finalidad de compensar la huella de carbono que generan las actividades del Banco, que el 2021 alcanzó a 2.070t Co2.

“El Banco no solo financia la plantación, sino que también se encarga del mantenimiento hasta que lleguen a edad adulta”, explicó el Vicepresidente de Negocios del BISA, Franco Urquidi.

Estos árboles llegarán a absorber en su etapa de madurez, aproximadamente, 932 toneladas de dióxido de carbono (Co2) por año y “de este modo se compensará cerca del 45% de las emisiones que se generarán con las operaciones de nuestra entidad”, precisó.

El Pulmón Parque Urbano Central (PUC) contaba con 500 árboles y este año se plantaron otros 400, llegando a 900 en esa área. Del mismo modo, existen 2.388 unidades en la Avenida Kantutani y 500 en el parque Bartolina Sisa de Aranjuez.

También se han plantado 340 en el barrio Auquisamaña, 2.263 en el bosquecillo de Auquisamaña y a las 200 unidades que había en el Bioparque Vesty Pakos de Mallasa se han sumado 525 para para hacer un total de 725, consolidándose el “Pulmón Vesty Pakos”.

“De los 525 que plantamos en el Vesty Pakos, este año, 300 fueron financiados por el Banco y 225 fueron donados por colaboradores del Banco mediante la Campaña Nacional “Dona un Árbol” y fueron ellos mismos, con sus familias, quienes realizaron la plantación”, anotó Urquidi.

El programa ya había plantado 162 árboles en la ciudad de Sucre, pero ahora la iniciativa “Dona un Árbol” se ampliará a otros departamentos, precisamente, para apoyar la reducción del dióxido de carbono (Co2).

“La idea es ampliar los Pulmones BISA que, además de embellecer el paisaje, permiten mejorar la calidad del aire”, puntualizó Uquidi. Además, precisó que el BISA busca mantenerse como empresa “Carbono Neutral” y contribuir de este modo al desarrollo sostenible del país. 

El programa Pulmones BISA ha demostrado su sostenibilidad desde 2016 porque utiliza hidrogel que es tecnología que minimiza el uso de agua. También se hace cargo de la poda, tratamiento fitosanitario y la reposición de aquellos árboles que no sobreviven.

“Es importante destacar que, los árboles en las zonas urbanas cumplen funciones ambientales fundamentales, como la purificación del aire, la sujeción del suelo y la regulación del ciclo hidrológico, generando humedad en la atmósfera y aportando en la recarga de acuíferos a través de sus raíces”, remarcó el Ejecutivo del BISA.

COCIENCIA AMBIENTAL

Los Pulmones BISA están incluidos en su programa de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) que en 2010 fue la primera entidad financiera en medir la Huella de Carbono de sus operaciones.

Este conjunto de actividades, internas y externas, han logrado involucrar a los colaboradores del Banco, “un trabajo en equipo comprometido con el desarrollo sostenible”.

Por eso, internamente se aplica el Manual de Sistema de Gestión Ambiental (SGA) que norma tanto el ámbito económico como el impacto ambiental de las actividades del cliente, antes de la otorgación de créditos.

Además, se lleva a cabo el concurso interno Guardianes del Planeta, destinado a reducir el consumo de energía eléctrica, agua y papel, además de promover el reciclaje en todas las operaciones del Banco y en hogares de sus colaboradores.

El BISA también instaló paneles solares en sus principales edificios para reducir el consumo de energía convencional, un aporte que ha merecido reconocimiento de varias instituciones.

Banco BISA ya implementó siete “Pulmones BISA”