El empresariado cruceño, mediante un comunicado, afirmó que 20 de los 35 sectores económicos medidos por el Gobierno nacional, aún se encuentran por debajo de sus ventas de 2019, por lo que rechazan el incremento salarial que propone la Central Obrera Boliviana (COB) y la decisión del Gobierno que pueda basarse en el ente matriz de los trabajadores.
Resaltan que sectores como madera, azúcar y confitería muestran deterioros superiores a los observados el año pasado.
Otra de las grandes inconsistencias, que refleja el sector privado, es la aplicación de aumentos salariales iguales a todos los sectores y rubros. Las condiciones y posibilidades de rubros como, por ejemplo, la gastronomía, hotelería y la construcción que se encuentran aún en casi 20% por debajo del 2019 son muy diferentes a las de aquellos rubros que han podido sortear el ventarrón de la pandemia, problema que afectó considerablemente al sector manufacturero.
La Cámara de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz), la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz – Bolivia (Cainco), la Cámara Gastronómica de Santa Cruz (CG-SCZ) y la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz (Fepsc); conjuntamente anunciaron su rechazo al incremento salarial, debido a la crisis económica que se está atravesando producto de la pandemia del Covid-19.
Cabe recordar que la COB presentó un planteamiento de alza salarial del 7% al haber básico y 10% al mínimo nacional y el Ministro de Economía, Marcelo Montenegro el pasado 29 de marzo afirmó que “para esta gestión hay una probabilidad buena” de que se pague el segundo aguinaldo.
En este sentido, los empresarios de Santa Cruz indicaron que, con ese discurso, el Ministro “crea expectativas a fines de marzo, en un momento en que nadie puede saber cómo estará la economía hasta junio. Habla de probabilidades mientras que nuevas tormentas aparecen en el horizonte”, asimismo recordaron que el Instituto Nacional de Estadística tarda hasta septiembre para saber cuánto creció el país económicamente el primer semestre del año en curso.
Acusaron al Gobierno de sólo reunirse con “grupos privilegiados de dirigentes” y desconocer la realidad, las condiciones y las adversidades con que se enfrentan cada mañana los panaderos, carpinteros, productores de alimentos y todos aquellos que crearon empleos y que tienen que preocuparse de pagar las quincenas y sueldos a fin de mes.
Añadieron que en las economías más exitosas se toman dos parámetros básicos: la inflación y la productividad; Señalaron que en Bolivia la inflación registró un aumento de 0,90% el año pasado. A marzo fue de 0,77%. La división Alimentos y Bebidas no Alcohólicas muestra una disminución de los precios de 0,62%, golpeada por el contrabando, por lo que la inflación no explicaría un 7% o 10% y la productividad tampoco, “en la mayoría de los rubros, la productividad no creció”, indicaron.
¿Qué propone el empresariado cruceño?
El documento proporcionado por las instituciones que representan a los empresarios cruceños propone un “giro” en las políticas salariales, con cuatro propuestas.
La primera es que las negociaciones se deben realizar entre los representantes genuinos de los trabajadores y aquellos que pagan las cuentas, que son los emprendedores y empresarios; esto en referencia a la solicitud de ingresar a las mesas de trabajo que compartieron el Gobierno nacional y la COB de los cuales no participaron.
La segunda propuesta es que se debe dar un incremento salarial a maestros, previa reunión con el Ministerio de Educación; de la misma forma el sector salud y la cartera de Estado correspondiente; en el caso de aumentos salariales de la industria se debe concertar con los representantes de los sindicatos fabriles y empresas del rubro.
La tercera es que para las negociaciones en cada sector y rubro se deben definirse referencias válidas.
Y la cuarta es que la discriminación al sector privado debe terminar.
