La aprobación de siete créditos pendientes por $us 779,2 millones y del proyecto de la Ley del Oro de Producción Nacional están estancados en la Asamblea Legislativa Plurinacional debido a pugnas internas del partido de Gobierno (MAS), critican tanto opositores como autoridades del Ejecutivo.
“Las fricciones políticas que se generan en la Asamblea Legislativa están imposibilitando que de manera rápida se implemente la reconstrucción de la economía, por eso nuestra preocupación desde el Ejecutivo para que los asambleístas entiendan que la reconstrucción es un patrimonio de todos, no es un logro económico de un sector, eso va en beneficio de todos los bolivianos”, alertó el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, informó el diario Ahora el Pueblo.
Sostuvo que se debe tomar en cuenta que el país está atravesando un momento importante de su reconstrucción, por lo que se requieren esos recursos, que ya están aprobados por los organismos internacionales.
Mencionó que los créditos son provenientes principalmente de la CAF, el Banco Interamericano de Desarrollo, JICA y el Banco Mundial.
Explicó que uno de los créditos que debe ser aprobado en la Asamblea, proveniente del BID, por $us 500 millones, permitirá cubrir parte de los gastos del Gobierno para atender la pandemia, en la compra de vacunas, pruebas y recursos que se entregaron a los gobiernos subnacionales para que se ejecuten acciones directas contra esta pandemia. Está también un crédito de $us 130 millones con JICA.
“Si hay asambleístas que están en contra de la aprobación de estos créditos, en el fondo están diciéndole ‘No’ a la reconstrucción económica, le están diciendo ‘No’ al modelo económico que le ha dado bienestar a los bolivianos. No podemos secuestrar la solución económica a partir de simplemente posturas políticas”, remarcó la autoridad.
De acuerdo con el Ministerio de Planificación, hay siete créditos pendientes por $us 779,2 millones.
Obstaculizan ley estratégica
El ala evista del Movimiento Al Socialismo se unió a la oposición y paraliza en la Asamblea Legislativa el proyecto de Ley del Oro de Producción Nacional. Esta norma está destinada a la compra y refinación de este mineral por el Banco Central de Bolivia (BCB), con el objetivo de aumentar las reservas del país.
Esta propuesta fue enviada hace dos años a la Cámara de Diputados. En febrero de este año, el jefe de bancada del MAS, Andrés Flores, informó que primero se debe llegar a acuerdos con los cooperativistas y luego se debatirá la propuesta.
De manera más enfática, el diputado del ala radical del MAS, Freddy López, propuso la paralización de dicho proyecto bajo el argumento de que la dirigencia de los cooperativistas mineros se opone a la “certificación responsable”.
El 24 de marzo de este año, esta ley volvió a ser rechazada, esta vez por el diputado oficialista del “ala radical” Renán Cabezas, quien dijo que el proyecto no será aprobado a menos que se modifique el artículo 9, que hace referencia a la potestad del BCB para comprar y vender oro.
El 11 de abril, el presidente de Bolivia, Luis Arce, en una entrevista concedida a Cadena A, explicó que esta ley es estratégica para el país, porque se transformará en divisa y con eso se incrementarán las reservas internacionales del país. “Hoy el mundo se está refugiando en el oro, pero como divisa para afrontar la crisis económica”, remarcó en esa oportunidad el mandatario.
Opositores ven pugnas internas por pegas
Después de que el Gobierno denunció que “friccionas políticas” bloquean la aprobación de créditos, parlamentarios de oposición consideraron que el ala “evista” del MAS está chantajeando al Ejecutivo en procura de “pegas, “cuotas”, candidaturas y hasta forzar que el presidente Luis Arce decline públicamente la opción de ser reelecto, informó la red Erbol.
Según el diputado de Comunidad Ciudadana, Marcelo Pedrazas, la oposición busca dialogar para que el Gobierno actué de manera transparente en la reactivación de la economía, pero el ala “evista” del MAS busca chantajear para sacar rédito político a la necesidad de divisas que tiene el país.
Consideró que el primer requerimiento del “evismo” para aprobar leyes consiste en que “el presidente Luis Arce diga de manera pública que no va ser candidato a la presidencia”.
Por Constitución, Luis Arce podría postular a la reelección en 2025, pero dentro del MAS los seguidores del exmandatario Evo Morales ya lo impulsan como candidato presidencial.
