viernes. 03.05.2024

RIN 2023, al límite de la crisis

 Luis Fernando Romero Torrejón es Presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija.

Este jueves 4 de enero el BCB presento su informe sobre las Reservas Internacionales Netas y la Compra de Oro en el mercado interno a diciembre de 2023. Respecto a nuestras RIN el año pasado cerramos con un valor de $us. 1.709 millones, de los cuales el 92% es oro y apenas un 10% son divisas; respecto al 2014, hubo un cambio drástico, teníamos RIN por un monto de $us. 15.123 millones, de los cuales un 87% eran divisas y solo un 11% oro. La evolución de nuestras RIN es preocupante, desde el 2014 al 2023 las mismas descendieron en un 89%, lo más alarmante son las divisas, en un 99%, el oro solo en un 5%. Sin embargo, la caída durante el año pasado fue importante, de enero a diciembre 2023, descendieron en un 53%, las divisas en 55% y el oro en 41%, el descenso es sostenido y peligroso.

El Gobierno indico que el año pasado se gastó $us. 2.682 millones para importar carburantes, unos $us. 7,45 millones al día; con el actual saldo de divisas, no nos alcanzaría ni para un mes de importación de estos bienes. Se espera por parte del BCB mayores ingresos por deuda externa ($us. 3.732 millones), el pago de venta de gas natural a la Argentina ($us. 212 millones) y la compra de oro por unos $us. 600 millones para fortalecer nuestras RIN. Esto no será suficiente, el ritmo de contracción de las reservas y sobre todo de sus divisas es acelerado, el flujo de este último es más grande el de entrada que de salida, sobre todo por nuestras importaciones, que se evidenciaron en la escasez de combustible a finales de año.

Hay que recordar que las RIN tienen como finalidad principal mantener la estabilidad macroeconómica del país y el poder adquisitivo del peso boliviano, lastimosamente, desde hace varios años, las mismas se utilizaron para tapar el déficit fiscal del país mediante el pago del gasto público en importaciones, cancelación del servicio de la deuda externa, subsidio de carburantes, mantención de políticas sociales y hasta la dotación de dólares al público de manera directa. La caída es muy riesgosa, nos encamina a una crisis no solo cambiaria sino de Balanza de Pagos, con resultados funestos como la devaluación de nuestra moneda, inflación galopante y la pérdida del poder adquisitivo, si es que no se hace un reajuste sensato, a corto plazo, en la política monetaria y fiscal del país, como liberar las exportaciones, discriminar o eliminar parcialmente los subsidios, achicar el gasto público, combatir el contrabando de carburantes, aplicar normas que atraigan la inversión extranjera, entre tantas. En sencillas palabras, como país, debemos hacer economía doméstica, “mejorar tus ingresos, reducir tus gastos, optimizar tus recursos.”

RIN 2023, al límite de la crisis