El congestionamiento vehicular que se generaba en horas pico alrededor del puente Mario Foianini Lozada, el principal ingreso a la zona del Urubó, municipio de Porongo, ha disminuido notablemente.
Ese es uno de los resultados del nuevo puente Metropolitano I Mario Foianini Lozada, que conecta Santa Cruz de la Sierra con Porongo, inaugurado hace más de un mes, en el mes aniversario del departamento cruceño.
La construcción del puente Metropolitano, que consta dos carriles y una ciclovía, fue ejecutada por la Gobernación de Santa Cruz y demandó una inversión de Bs 92 millones.
Para hacer realidad la anhelada obra tuvo que pasar una década con muchas trabas en el camino. Uno de sus principales impulsores, Mario Foianini Landívar, presidente ejecutivo de la empresa Colinas del Urubó, quien recorrió este largo proceso, contó a ECONOMY cómo se fue gestando esta gran obra hasta llegar a construirse.
¿Cómo nace la iniciativa de plantear la ampliación al puente Mario Foianini Lozada?
Es importante recalcar que la construcción del primer puente hecha 100% con fondos privados, la llevó adelante el ingeniero Mario Foianini Lozada, mi señor padre, y fue inaugurado en abril de 1999. A partir de esa inauguración, se desató un desarrollo desmesurado en la zona de Colinas del Urubó, el Urubo y en el municipio de Porongo, a tal punto que en poco tiempo el puente que estaba dimensionado para 3.000 vehículos día, quedó prácticamente colapsado.
A partir de eso se iniciaron diferentes gestiones como la construcción de un puente Bicentenario en 2010 y en 2014 se lanzó la iniciativa del puente Urubó Village. Pero nosotros, por nuestra propia cuenta, ya pensamos que era posible trazar una ampliación a esta ruta existente y hacer un segundo puente paralelo al puente Urubó, como se lo denominaba en aquella época.
¿Cómo se hicieron las primeras gestiones para gestar este puente?
En el año 2012 tuve las primeras gestiones, reuniéndome con la Asamblea Legislativa, para hablar sobre el tema. Nos dieron buena cabida y se siguió taloneando. Año tras año se presentó ante el municipio de Porongo, en el Concejo Municipal, un proyecto de modificación de las vías con la oportunidad de realizar una ampliación del puente existente.
Sin embargo, después vino el momento donde se empezó a mostrar una férrea oposición por parte de la alcaldía de Santa Cruz de la Sierra en relación a la viabilidad de la construcción del puente. Esa fue la gota que colmó el vaso y detonó la posibilidad y la necesidad de empezar a trabajar con más ahínco por la viabilidad de este puente.
Fue así que en el año 2016 me reuní con los técnicos de la gobernación cruceña, toda vez que absolutamente nadie le prestaba atención ni le hacía mantenimiento al puente que había construido Mario Foianini y logramos una intención de acuerdo de poder tratar de viabilizar el traspaso de la administración de ambas alcaldías a la gobernación, puesto que ese acuerdo no avanzaba debido a que la Alcaldía de Santa Cruz de la Sierra, a la cabeza de don Percy Fernández no quería firmarlo. No fue hasta el 2018 cuando las juntas de dilatación empezaron a fallar y a colapsar, dónde se vio la necesidad imperiosa de hacer un mantenimiento a una obra que ya había sido entregada hace muchos años atrás.
¿Cómo se logró viabilizar su construcción ante una férrea oposición de la anterior administración de la Alcaldía cruceña?
De esa crisis del 2018, más la imperiosa negativa de la alcaldía cruceña de viabilizar los otros puentes, porque negaba la oportunidad del puente Bicentenario y la oportunidad sobre la avenida Roca y Coronado promovida por otro frente privado, nos obligó a pensar y repensar la posibilidad de que se pueda llevar adelante la construcción de este puente, entonces en el convenio que se firmó entre la Alcaldía de Porongo, la Alcaldía de Santa Cruz y la Gobernación en el año 2018, convenio intergubernativo para poder hacer frente al mantenimiento, en la cláusula décima se estipuló y se explicó que a partir de la conclusión de esos trabajos la administración recaía 100% en la Gobernación.
Entonces fue ahí, en ese momento, donde yo presenté la oportunidad de hablar con el Gobernador y el equipo técnico de la Gobernación de ofrecer la posibilidad de que se pueda hacer una ampliación en la ruta existente y de hecho mire ahora ya la hemos estrenado. Esa decisión fue acertada, esa propuesta fue aceptada por el exgobernador Rubén Costas, Roly Aguilera y Hugo Sosa a la cabeza de la Gobernación, con quienes estoy muy agradecido por todo el trabajo que se hizo. Y el 3 de mayo del 2018, ante la crisis inminente de la inviabilización por parte de la alcaldía Santa Cruz, de cualquier puente, la Gobernación anuncia la construcción de este puente paralelo que se inició en el año 2019.
Y cosa curiosa, que la orden de proceder se dio, después de sufrir todo el proceso de licitación, el día 2 de octubre de 2019 el día del cumpleaños del finado ingeniero Mario Foianini Lozada, como para decir ¡Que regalo divino estamos recibiendo del cielo! Entonces en ese punto se da la orden de proceder y se inicia los trabajos con la pandemia de por medio. Como se dio la declaratoria sanitaria a nivel país y departamental, las empresas siguieron trabajando en la medida de sus posibilidades y se demoró un poco la obra, por supuesto, pero finalmente cuando ya viene el cambio de gestión de la gobernación con las nuevas autoridades electas se da la aprobación para la construcción de los accesos, y ya eso fue lo último que se ha ido dando en este último tiempo desde el año 2021 en adelante. Y el 1 de septiembre del 2022 se ha inaugurado este puente.
Cuando planteo hacer la ampliación del puente ¿Recibió apoyo? ¿Quiénes se fueron uniendo a esa iniciativa?
Bueno, siempre ha habido el clamor popular, eso no lo podemos negar. Se han hecho muchas luchas, muchas marchas de huelga, por la necesidad de tener una construcción de los puentes. Pero este puente metropolitano Mario Foianini Lozada, dentro del marco de la creación de la ruta metropolitana, fue una gestión que llevé prácticamente solo.
Luego, la Asociación de Empresas Privadas por el desarrollo de Porongo (AEDEP), institución que fue formada para luchar por los intereses del desarrollo del municipio, participó en diferentes actividades para poder tratar de viabilizar la construcción de este puente.
Un puente es sinónimo de desarrollo, entonces no podemos pretender que toda la inversión para poder generar estas fuentes de desarrollo, emane de fondos privados. Entonces, esta obra representa y simboliza el primer apoyo público para poder dinamizar el desarrollo regional cruceño. Y ahora estamos aquí, viendo esta obra magnifica que va dar una gran oportunidad a todos.
¿Cómo se siente ahora al ver este sueño hecho realidad?
Tengo una gratitud inmensa con quienes gestaron, construyeron, desarrollaron y, sobre todo, para mi es una satisfacción que va más allá y trasciende, porque por ley se ha creado de que dentro de esta ruta Metropolitana 1 se le dé el nombre de Mario Foianini Lozada en honor a ese gran hombre que fue mi padre, que tuvo los pantalones más firmes y apostó por el desarrollo cruceño. Entonces yo creo que no celebramos solo aquí sino también se está celebrando en el cielo. Y al final es como todo, nosotros somos personas trabajadoras, personas de bien y hacemos esto por amor, cariño a nuestra región y, sobre todo, por dejarle un legado y un ejemplo a nuestros hijos, que más adelante ellos tomarán la batuta y tendrán que salir adelante y también mostrar su entereza con el desarrollo y con propuestas similares.
¿Cómo va a impulsar este puente la zona del Urubó y, en general, al municipio de Porongo?
Esto va a dinamizar completamente todo el desarrollo inmobiliario, también va a mejorar la condición y la calidad de vida de los pobladores. El Puente Metropolitano dinamiza la economía y el desarrollo integral de Porongo.
Nos brinda un gran apoyo, permite que estemos menos restringidos y con una circulación más fluida para poder llevar los hijos al colegio, ir al trabajo, progresar y así acceder a diversos servicios que son necesarios. Ante la falta de oportunidades y falta de infraestructura todavía debemos buscar la posibilidad de recibir estos servicios en la ciudad de Santa Cruz. Pero tenemos que entender que la metropolización es una realidad y Santa Cruz metrópolis obedece justamente a la integración de los municipios.
¿Qué se viene aquí en adelante? ¿cuál es el siguiente paso que se debe dar para continuar con el desarrollo?
Hay grandes desafíos: la planificación, el cuidado de nuestros acuíferos, la prevención de que no nos vaya a faltar agua en el futuro, pero no va a ser suficiente porque con las proyecciones de crecimiento de Santa Cruz hay que pensar en productos a más largo plazo, más intensos. Yo me animaría a desempolvar el proyecto hidroeléctrico Rositas, por ejemplo, porque ese es un proyecto de interés regional y que puede garantizar la provisión de agua a gran escala para toda la población.
