Laboratorios Bagó de Bolivia S.A. revalidó la certificación internacional en bioseguridad otorgada por Intedya, institución dedicada al análisis y legitimación de empresas, que apunta a asegurar que las fábricas y productoras cumplan con los requisitos debidos.
Este diploma se confiere a las empresas tras una exhaustiva auditoría, que en el caso de Bagó incluye los cinco predios con los que cuenta en La Paz. A lo largo de la inspección se toman en cuenta diversas variables como las acciones desarrolladas en la producción, el material de protección y el cuidado de los colaboradores.
“Para Laboratorios Bagó de Bolivia es importante avalar todos nuestros protocolos de bioseguridad, y a la vez volver a revisar muchos aspectos de los procedimientos de cuidado. Actualmente, el protocolo está en su revisión número 4, y sólo tiene un año de vigencia. Se supone que las medidas de seguridad tienen que estar activas todo el tiempo, porque nosotros tenemos planta y tenemos turnos”, explicó Linda Ramírez, coordinadora de Responsabilidad Social empresarial de la empresa.
Intedya es una compañía internacional con base en Europa y presencia en 16 países. Brinda servicios de consultoría, auditoría, formación y evaluación de empresas, con la finalidad de que funcionen de manera biosegura. Opera en Bolivia desde hace casi dos años, brindando acreditación a una decena de empresas nacionales de todo orden. Como ocurrió durante el primer año de certificación, Intedya tiene la potestad de llevar a cabo controles y monitoreos esporádicos de las instalaciones para dar su veredicto.
“La bioseguridad es una forma de comportamiento que tiene que ser implementada por todos. No sólo se queda dentro de la empresa, sino que deben mantener esa conducta en sus casas. De acuerdo al conocimiento que se va teniendo en relación a la transmisión del virus, se van haciendo las modificaciones al protocolo, y Laboratorios Bagó ha sabido responder en cada paso del camino”, afirmó la Dra. Elizabeth Justiniano, asesora médica de la farmacéutica.
Tras 45 años en nuestro país, Bagó se ha posicionado como una empresa líder, comprometida con el bienestar de la sociedad boliviana. Desde los primeros momentos de la pandemia, la farmacéutica ha dado todos los pasos que hacían faltan para no interrumpir la fabricación de medicamentos, acatando los manuales de bioseguridad y protegiendo a su personal sin descuidar el estricto control de calidad que ya es sinónimo de Bagó.
