La empresa Navegación Aérea y Aeropuertos Bolivianos (Naabol) anunció la suspensión temporal de operaciones aéreas en varios aeropuertos del país debido a una densa humareda que afecta a diversas regiones de Bolivia. En conferencia de prensa, el Director General Ejecutivo de la estatal, Elmer Pozo, detalló la situación, subrayando que la seguridad de los pasajeros como la mayor prioridad.
Entre los aeropuertos más afectados, el Aeropuerto Teniente Jorge Henrich Arauz de Trinidad y El Trompillo de Santa Cruz se encuentran inoperables, con una visibilidad mínima de 300 y 1.000 metros respectivamente. Rurrenabaque también fue clasificado como inoperable, con visibilidad de solo 500 metros. Otros aeropuertos que han cesado operaciones incluyen Guayaramerín, Riberalta, y varias pistas aéreas en el Departamento de Santa Cruz, como Ascensión de Guarayos, San Javier, Concepción, San José de Chiquitos, San Ignacio de Velasco, Roboré, Puerto Suárez y Vallegrande.
Por otro lado, los aeropuertos de Viru Viru, La Paz, Cochabamba y Cobija mantienen operaciones con visibilidad reducida pero dentro de los márgenes operativos: 1.600 metros en Viru Viru, 2.000 metros en La Paz y Cobija, y 3.000 metros en Cochabamba.
La situación está directamente relacionada con la alta presencia de humo en la región oriental de Bolivia, generada por más de 5.000 focos de calor en Sudamérica. Estas condiciones han impedido el restablecimiento normal de los vientos del norte. Se espera que un frente frío débil, previsto para el jueves en Santa Cruz, pueda mejorar temporalmente las condiciones, aunque la visibilidad podría continuar siendo limitada a lo largo de septiembre, dependiendo del aumento de los focos de calor.
Sin embargo, Naabol reiteró su compromiso con la seguridad y la continuidad de las operaciones, subrayando que seguirán monitoreando las condiciones climáticas para informar cualquier cambio en la situación operativa.