El Ministerio de Culturas promueve el tradicional sillpancho cochabambino, creado por doña Celia Lafuente hace más de 70 años, con el propósito de revalorizar la gastronomía boliviana como dinamizador de la economía y del turismo.
En el marco de su política de promover la cultura gastronómica, originaria y creativa de Bolivia, este miércoles se realizó la preparación del tradicional sillpancho y se presentó su historia.
Al acto asistieron los nietos de la creadora del típico plato cochabambino Julio César López Zapata y Rodrigo Rocabado Zapata, quienes lideran el emprendimiento gastronómico Doña Celia.
En la zona llamada las Pampapilas de la ciudad de Cochabamba, entre las calles Lanza y Ecuador, Celia inició un negocio en la venta del “bisté”, un platillo que se servía en las noches cochabambinas que tenía papas en rodajas fritas y ensalada mixta de tomate, cebolla, locoto, sobre una carne apanada frita, relató Julio César.
Posteriormente, sus comensales le pedían agregar arroz y huevo frito, lo que generó que aumenten los clientes.
“Uno de sus comensales, don Pancho, un día le dijo: Celia dame una sillpa (delgado en quechua). Ella se enfadó, por lo que le contestó: aquí está su sillpa Pancho, ahora serás sillpancho y desde entonces, los demás comensales empezaron a pedir el ‘sillpancho’”, recordó Rodrigo.
“El sillpancho es uno de los platos preferidos en Bolivia y otros países del mundo, donde llegó este platillo, es un embajador del departamento de Cochabamba y de Bolivia”, aseguró el director del Patrimonio Cultural, Gonzalo Vargas.
El Ministerio de Culturas apoya la actividad de la gastronomía, porque es un elemento fundamental para la reactivación económica y, sobre todo, para estimular el turismo.
