viernes. 19.04.2024
REVOLUCIÓN FINANCIERA

Brasil líder en inclusión: 85% de la población accede a servicios financieros

La oportunidad que abrió crisis provocada por la pandemia de COVID-19 fue mejor aprovechada por Brasil que incorporó 16 millones de ciudadanos al sistema. El esfuerzo combinado de los actores públicos y privados permitió que las bondades de la innovación sean aprovechadas al máximo dando lugar a una revolución silenciosa

La pandemia aceleró el acceso de la población a los servicios financieros. Foto: CGAP
La pandemia aceleró el acceso de la población a los servicios financieros. Foto: CGAP

La inclusión financiera en la región se baila al ritmo de la samba. Desde el comienzo de la pandemia de COVID-19, cerca de 16 millones de personas fueron integrados al sistema financiero de Brasil con lo que el 85% de su población tiene acceso a servicios financieros.

Un reporte del Portal FinDev, el Portal de las Microfinanzas desarrollado por el el Grupo Consultivo para Ayudar a los Pobres (CGAP), establece que, en los últimos 10 años, “una revolución silenciosa dentro del país ha llevado a una mayor competencia, más inclusión financiera y menores costos bancarios”.

La explosión de los pagos digitales en Brasil, dice el documento, ha generado un ecosistema financiero innovador que funciona para la gente común.

“Esto representa uno de los mayores aumentos en la población bancarizada que se ha visto en décadas”.

Aunque la región registró avances importantes en los últimos años, los resultados del gigante sudamericano contrastan y de lejos.

De acuerdo con el reporte “Acelerando los pagos digitales en América Latina y el Caribe” publicado en mayo pasado por el BID y el World Economic Forum,  En América Latina y el Caribe “los pagos digitales se convirtieron en el principal método de compra: el comercio electrónico creció un 18% en 2020”.

Sin embargo, dice el documento, persisten numerosos desafíos que impiden la generalización del uso de los pagos digitales en toda la región, “desde la falta de acceso, de armonización reglamentaria y de soluciones de pago asequibles hasta la necesidad de una mayor cooperación entre el sector público y el sector privado, de protección de los consumidores y de un ecosistema de pagos abierto, inclusivo e interoperable”.

“Una gran parte de la población continúa sin bancarizar en ALC y amplios sectores de la población siguen prefiriendo utilizar dinero en efectivo. En 2020, un 45 % de los habitantes de América Latina no poseía una cuenta bancaria y aproximadamente un 80 % carecía de una tarjeta de crédito”, dice el reporte.

Brasil fue la excepción. Según el FinDev el espectacular progreso es el resultado de una combinación de elementos: “una revisión del marco regulatorio de pagos, el uso intensivo de la tecnología, iniciativas empresariales y un enfoque en la creación de productos que abordan las necesidades de los clientes brasileños”. Es decir, una tarea conjunta.

El boom de la inclusión financiera en Brasil

A pesar de las barreras para la adopción de pagos digitales algunas experiencias marcaron la diferencia. Las prometedoras empresas de FinTech de Brasil están buscando una solución a este reto, en colaboración con otros actores, dice FinDev.

“Nubank, fundado en San Pablo en 2013, es hoy una de las plataformas de banca digital más grandes del mundo. Ofrece productos financieros a más de 53 millones de clientes. Pero, más importante aún, datos recientes muestran que Nubank abrió el camino al sistema financiero a 5,6 millones de personas que nunca antes habían tenido acceso a servicios bancarios”.

La clave del éxito

En el análisis del Portl de Microfinanzas la innovación no puede ser la única en echarse al hombro la inclusión financiera; “los gobiernos deben colaborar también en este esfuerzo”.

“Las políticas de gobierno o las regulaciones pueden, efectivamente, crear barreras de entrada para los proveedores de pagos o nuevos actores que intentan innovar en el mercado. Muchos países adoptan costosos requisitos de licencias, requisitos de capital, procesamiento doméstico y restricciones de datos, en su esfuerzo por aumentar la seguridad, controlar los costos o abordar preocupaciones en torno a la privacidad, pero estos factores pueden tener la consecuencia no deseada de crear barreras de acceso al mercado”.

En el caso de Brasil, el Banco Central fomentó el ingreso de nuevas instituciones a través de una regulación proporcional.

Según el Portal en Brasil, el panorama regulatorio a favor de la innovación permitió a la banca digital aprovechar al máximo las nuevas tecnologías, “las que han sido claves en el avance de la inclusión financiera que se observó durante la pandemia. Sin embargo, éste no ha sido el caso para todos los países de ALC, especialmente para las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES)”.

Un estudio reveló que los procesos de incorporación de los comerciantes son uno de los principales obstáculos para la inclusión del 80% de las MIPYMES en la economía formal, y la razón por la cual continúan siendo informales.

Brasil líder en inclusión: 85% de la población accede a servicios financieros